Los cercos eléctricos son una excelente solución de seguridad perimetral tanto para residencias como para zonas industriales y comerciales. Estos sistemas actúan como barreras físicas para impedir el ingreso de intrusos o posibles delincuentes a una propiedad, ya sea una vivienda, condominio, parcela o cualquier otro inmueble.
A continuación, te explico cómo funcionan los cercos eléctricos y qué elementos contienen:
Funcionamiento:
Un cerco eléctrico actúa como elemento disuasorio. Cuando alguien toca o intenta subir por el cableado, recibe una descarga eléctrica fuerte. Aunque no causa daños severos, sí es incómoda y dolorosa, lo que previene la invasión de la propiedad.
Los alambres de aleaciones de aluminio o alambre galvanizado se instalan de forma paralela al piso o muro, formando de seis a ocho líneas. Estas son sostenidas por soportes, aisladores y tensores para dar el tensado correcto.
La energía que circula por los conductores debe ser de aproximadamente 2 Joules, con pulsos de 1 o 2 Hz. Esto repelerá a un intruso sin poner en riesgo su vida ni la del dueño.
El cerco debe tener una conexión a tierra, un cableado de salida y uno de retorno para disponer de electricidad, un circuito de pulsos y un generador con sistema de carga de baterías para brindar autonomía en caso de corte de suministro eléctrico.
Elementos:
Alambres: De aleaciones de aluminio o alambre galvanizado.
Soportes: Sostienen los alambres.
Aisladores y tensores: Aseguran el tensado correcto.
Generador: Proporciona la energía eléctrica.
Conexión a tierra: Garantiza la seguridad.
Cableado de salida y retorno: Permite el flujo eléctrico.
Mantenimiento y precauciones:
Realiza pruebas de funcionamiento periódicas.
Evita manejo inadecuado de las uniones y usa hilos de acero galvanizado.
Coloca los postes en ubicaciones adecuadas.
Asegúrate de que el generador tenga carga de batería en caso de cortes de luz